El Sueño De Dos Tarados

"...nos hicimos unas fotos de cabina en tres minutos. Parecemos la cuadrilla de la muerte..."

Esta cuadrilla de la muerte, gracias a la fortuna -y a la lola-, posee entradas que sirven para que ellos se dispongan a ver cómo los angelitos Pancho y García de Diego tocan la guitarra, mientras una tal román, que creo que es maría magdala, hace los coros a dios, que es quien canta...

El más borracho de los poetas, el más guarro de los románticos, en su gira carretera y top-manta, pretende hacernos felices...

JC nos ha dicho que si el primo de su padre le acompaña tocando esta vez, como suele hacer a veces, no sólo veremos a dios, sino que conseguirá meternos en camerinos... es decir; que tal vez conoceré a dios... y podré morir tranquilo.

Os contaré una breve historia:

Era yo un niño que no sumaba la década, cuando mi padre ya presumía de tener una radio en el coche donde sabina decía que le dieron las diez y las once... ahí es donde empieza mi memoria, que tal vez hubiese algo antes, pero...

Años después, un "no soporto el rap" volvía a llamarme la atención, a mí, que era un niño ya envenenado por el carnaval, y algo dentro me decía que aquella letra tenía algo de simpática y de carnavalera... pero no fue realmente hasta el año 2000, cuando la soledad de una fría tarde de domingo en sevilla me hicieron empezar a ser consciente de que a veces "sobran los motivos"...

A partir de ahí vinieron discos wenos -con dos camas vacías-, discos regulares -dímelo en la calle- y discos medio regulares -alivio de luto-. Pero siempre un estilo propio. Una poesía divina y una virtud indiscutible.

Yo no voy a hablar del tiempo que hace que no escribo aquí. Voy a ver a dios... al mío, no a uno que da amparo y refugio a torturadores, fachas egoístas y violadores... no. Yo voy a ver a un dios que borra las penas con canciones. A un fotógrafo de la vida. A un poeta de la calle. A dios.

Tengan un buen día. Espero que mañana no sea cuando esté lloviendo. Lleven Bombín.

Luisito.